jueves, 4 de agosto de 2011

Váyase Mr. Marshall

Una de economía general, para pensar un poco y airear un poco los temas que tanto nos presionan aquí.

Al ver las notícias no pude estarme de comentároslo.

Las grandes potencias, y lo pensadores de macroeconomía nos hacen jugarretas.
Como decía Hessel, el enemigo ahora es mucho más sutil de identificar, pero nos hace el mismo daño en nuestro llamado "estado de bienestar".

Estados Unidos y su gran máquina de poder reciben una lección de humildad.



Tienen que endeudarse para poder hacer frente a sus pagos. Revisan sus leyes y resulta que el tope de su propia ley no es suficiente para cubrir el endeudamiento necesario, que además tiene la gravedad de que si no se efectúa, entrarán en la situación de suspensión de pagos.

Eso les significaría que tendrían restricciones como las que sufrimos aquí, en sanidad, educación, etc.

Discuten entre ellos y al final deciden modificar su ley de endeudamiento en el último momento, con tal de poder hipotecarse lo suficiente para abordar su propio déficit.

Paralelamente, en Europa, tenemos un estrés histórico con la famosa prima de riesgo, que diariamente nos martiriza diciéndonos que nuestros bonos no valen para nada, y que no serán comprados porque no se fían de nosotros. Por tanto se nos dificulta vender nuestros bonos para poder acumular efectivo con el que poder hacer frente a nuestros pagos españoles.

Esa prima de riesgo, está dictada por empresas, que no sólo no dan cuentas a nadie, sino que en algunos casos se ha demostrado que influyen en los mercados manipulándolos, aumentando la prima de riesgo de un país, para invertir en él a bajo precio, y luego tener un beneficio cuando esa prima baje. Ignominioso.

Lo curioso del caso es que esas mismas empresas que informan de esas primas de países como el nuestro, perjudicándonos, no hacen ninguna valoración aquí de Estados Unidos. Hacen simples reseñas, o bien no nos comparan con ellos en los mismos listados.
Diríase que EEUU parece otro planeta.

Sería interesante saber quién mueve los hilos de esas empresas que emiten valoraciones sobre países, pues parece que Estados Unidos sea al menos un protegido de las mismas.

Mientras, aquí en nuestra España, tenemos restricciones en sanidad y educación, y los políticos hacen unos amagos de contención de gasto que están lejos de suponerles las incomodidades que el pueblo sí sufre.

Mr. Marshall, antes fué bienvenido, ahora debería dar ejemplo restringiendo su estado de bienestar, igual que nosotros.
Eso teniendo en cuenta de que por ejemplo aquí hay más coches oficiales que en todo EEUU, siendo nosotros 45 millones, y EEUU 250 millones.

Espero que al final no nos quiten nuestra ambulancia, que dado el atropello por ejemplo, nos hace mucha falta en un pueblo que tiene muchos habitantes de edad avanzada que necesitan cuidados.

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