Desde mi retiro vacacional, y sin más datos ni fotos que los que ya han sido publicados, y habiendo visto que, pocos días antes de marchar, se habían instalado de nuevo esos viejos cacharros en el Paseo Marítimo (Déu nos en guard!) que deberían estar en el chatarrero, intentaré aclarar algunos puntos, y ayudar a que la cosa no vaya a mayores.
Los parquímetros hace ya algún tiempo que se gestionan a través de CEMSSA, empresa municipal anteriormente dirigida por Carles Rion, ex concejal de comercio y nuevas tecnologías, ya fenecido políticamente, y ahora dirigida por ¿X?. A parte del alcalde, ¿quién es el/la máximo/a responsable?. Nos gustaría saberlo. Bueno, a lo que íbamos. Estos aparatos, de rancio abolengo como se diría, son de la más vieja tecnología, lo cual ya tiene guasa sabiendo quien lo dirigía (regidor de nuevas tecnologías), con averías constantes, mal funcionamiento, sin recambios y modelos variopintos, en sentido literal y figurado (mirad los colores). No hay día que no se queden sin batería, averiados, sin papel u otros problemas. Encima, a pesar del supuesto fin recaudatorio son antirentables: cuesta más el mantenimiento (personal, averías, etc.) que lo que se recauda. Suponemos que por eso se han puesto ahora, para intentar hacer “el agosto” con los veraneantes pardillos. Luego nos quejaremos de que no hay turismo.
Todos saben en CEMSSA y el Ajuntament que los parquímetros funcionan mal, muy mal. Por eso nuestra recomendación bloguera es que, ante cualquier denuncia que se encuentren en el parabrisas (sobre todo a residentes) se haga una reclamación INMEDIATA en Vía Pública indicando todos los datos. Por supuesto que lo de exigir el “importe exacto” es motivo de anulación de la denuncia por mal funcionamiento del aparato, más cuando no admiten tarjetas de crédito para el pago. Esperemos que el concejal de Vía Pública o el de Seguridad Ciudadana, en un alarde de sentido común, del que no hace gala CEMSSA, anule inmediatamente todas las multas de la zona azul por causa del mal funcionamiento de las máquinas.
OJO: la innovación tecnológica que se hizo en tiempos consistió en sustituir los talonarios de denuncias que se rellenaban a mano por equipos PDA con impresora y conexión GPRS con la Diputación para gestión on-line de las denuncias, normalmente al final de la jornada. Por eso es importantísimo que la reclamación se haga inmediatamente. Se innova para recaudar más pero no para gestionar mejor. Como siempre.
Ya sabéis, los pasos a seguir son:
2. Adjuntar copia del ticket de la denuncia. El original os lo quedáis, por si acaso hay que ir a mayores.
3. Si quereis, mandadnos por correo electrónico una copia de la instancia. Las coleccionaremos y cuando tengamos unas cuantas haremos una entrada sobre el tema.
Cuando los servicios municipales funcionan bien no hay excusa para el escaqueo y no pagar la zona azul, pero, con los servicios de chichinabo que tenemos no se puede exigir al ciudadano que pague por la inoperancia de un servicio municipal. Que se pongan las pilas, anulen las denuncias incorrectas o, mejor aún, que supriman la zona azul allí donde no estén en condiciones de prestar un servicio correcto.
Bueno, incluso lejos de Calafell y de presuntas vacaciones blogueras no dejamos de dar por c… y denunciar el mal funcionamiento de algunos servicios, esté quien esté, caiga quien caiga. Así es este blog.
Bon estiu a totes i tots