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El ayuntamiento ordena retirarlo al considerar que puede ser apología del terrorismo.
Un muñeco con la cara cubierta por un pañuelo rojo, capucha y que ondeaba la bandera estelada en una mano y sostenía una metralleta en la otra, apareció en lo alto de un mástil en la playa de Calafell en la mañana de ayer.
La Policía Local recibió ya a primera hora de la mañana decenas de llamadas de vecinos alertando de la situación. Los agentes vieron el muñeco y se dio aviso al Ayuntamiento, que ordenó la retirada inmediata al considerar que era una apología del terrorismo.
Brigada protegida
Miembros de la brigada municipal, acompañados por agentes de policía para evitar posibles incidentes, fueron los encargados de descender al muñeco ante una gran expectación de los bañistas. Fue necesaria una larga escalera de hasta tres tramos para poder cortar las cuerdas que sostenían al muñeco al mástil.
El maniquí fue izado aprovechando las propias cuerdas con las que se levanta la bandera que indica la calidad de las playas. La metralleta era de madera y la bandera estelada la sostenía con una caña de pescar que también hacía la función de brazos.
Cuando el muñeco estaba en el suelo algunos bañistas aplaudieron su retirada ya que consideraron que era violento, sin que se produjesen incidentes. El personal de la brigada municipal retiró el maniquí de forma urgente y se desconoce dónde ha sido llevado.
Debate
Para entonces la situación ya había generado un gran debate entre los vecinos y en las redes sociales. Son muchos los que han criticado que alguien tuviese la iniciativa de colgar el muñeco con la metralleta en la mano y han desmarcado las ideas independentistas de la violencia que representaba el maniquí.