Así estaba la nueva sala de plenos de calle Sant Pere, 10 minutos antes de empezar la sesión de hoy. Y luego ha llegado más público, ya empezado el pleno.
Se había criticado mucho esta sala con argumentos demagógicos para sembrar polémica (que si en Calafell Poble se quedaban sin actividad al llevarse la sala, que si no valía la pena el gasto y otras cosas parecidas).
Teniendo en cuenta que los plenos se retransmiten íntegramente (incluyendo preguntas del público), por radio y por web-tv, parece que habilitar esta sala no fue mala idea. Hay más público (y el pleno de hoy no tiene temas especialmente atractivos ni conflictivos) y el número de asistentes que hay ahora mismo, no entraría ni con calzador en la antigua sala del ayuntamiento.
Me ahorro hablar de la supresión de barreras arquitectónicas que se han eliminado, de la tecnología de que se dispone ahora para informar, de la gran polivalencia de esta sala para diferentes actividades y de otras mejoras que han sido criticadas por criticar.
