Es más barato tener a violadores y ladrones en la calle que en prisión. Lo es de cara al Estado porque para el ciudadano es una lacra y para la policía una tomadura de pelo.
La publicación de facebook que más visitas y comentarios ha tenido esta semana es la de la detención del ladrón de trasteros de Cunit y Calafell.
Otra que despertó polémica fue cuando, en plena investigación de Mossos, el blog adelantó que se estaban produciendo nuevos robos de trasteros en busca de bicicletas de gama alta.
Finalmente, siguiendo unas pistas, los Mossos detuvieron el día 21 de diciembre a dos hombres, ambos vecinos de Calafell, como presuntos autores, respectivamente, de 37 y 24 robos con fuerza en trasteros del Baix Penedès. Es una actividad lucrativa, en una noche pueden llevarse bicicletas que luego son revendidas en la calle y en internet muy por debajo de su valor, pero ellos se llevan cientos de euros por una noche de “trabajo” .
El problema viene cuando sabes que las pistas que condujeron a los Mossos a detener a los ladrones eran que ambos ya habían sido detenidos anteriormente por robar en trasteros. Y estaban en la calle. Y tras la detención del 21 de diciembre, vuelven a estar en la calle. Y ahora han vuelto a detener a uno de ellos por lo mismo, también estaba en la calle. Por tercera vez. Un lector dijo “entran por una puerta y salen por otra”. Y es así.
Indignación también al saberse que un violador de una menor de Calafell se ha librado de la cárcel porque ha prescrito el caso debido al colapso judicial en los juzgados.
La policía poco puede hacer, excepto detenerlos una y otra vez y llevarlos ante el juez que, ya se ve, los deja libres a la espera de juicio (al cual tienen muy fácil no presentarse). El ciudadano sólo puede indignarse y poco más.
Pero hay dos problemas de fondo. Uno es el colapso y la laxitud judicial y el otro los costes de mantener a la población reclusa. ¿Saben lo que percibe un parado de larga duración en el mejor de los casos? 426 euros. Si este señor delinque, y es encarcelado, el coste de mantener un preso en España es de 1.950 euros al mes y España tiene un alto índice de población reclusa. Cuando el preso salga, además tiene una ayuda estatal para la reinserción.
Conocemos la identidad de los ladrones de trasteros, pero no se puede publicar porque, encima, hay riesgo de una denuncia.
Así funciona, a día de hoy, el sistema en España. Los ladrones de trasteros están libres y cuando llegue el momento (semana santa) volveremos a ver noticias de robo de trasteros. La policía investigará y sólo podrán detenerlos si los pillan con las manos en la masa o con material robado.
Lo del violador no tiene nombre. Que un violador de una menor se vaya de rositas por sobrecarga burocrática supera el límite de lo humano.